Festejamos la pluralidad
política, por eso Crisol nació (hace casi un año) con la intención de
representar aquellas voces que no se identifican con las opciones existentes y
de esta manera restituir en los espacios del Joaquín un sano equilibrio entre
las diferentes modalidades de ejercer la política dentro de las
instituciones educativas y formativas, y que de esa manera mucha gente que no
se sentía representada por ninguna de las opciones existentes, encontrara una
nueva opción política afín a su mirada y a sus necesidades.
Seguramente haya muchas cosas
para mejorar; pero mejorar lo realizado no implica su destrucción total,
porque eso –entendemos- no es mejorar sino simplemente vaciar las instancias de
crecimiento colectivo.
Hemos sido agredidxs e
insultadxs desde el “anonimato” en infinidad de ocasiones, y aún así no hemos
respondido con el mismo tenor a los agravios, simplemente porque nuestra
posición es invertir energía y creatividad de manera auténtica en la construcción
de lo común, tal y como lo hicimos con la Revista “La Mezcolanza”, que fue solventada y financiada
en su totalidad por cada uno de nosotrxs.
Se nos acusa de haber sido
quienes iniciamos esta cadena de agravios porque no participamos de una serie
de actividades como el Taller de AntiEdipo; de no asistir a tal o cual reunión,
pero en esas acusaciones se puede percibir un reclamo que solo parece exigirnos
una postura servil. Como si rechazar una invitación, o simplemente querer hacer
algo distinto fuese en sí mismo insultante: si pensar diferente, o tener
posiciones divergentes respecto de aquello que intenta imponerse como única
modalidad posible y además legítima, pues entonces nuestro peor error habrá sido mantenernos
firmes en el intento de conservar nuestra libertad de hacer, decir, y pensar de
manera genuinamente independiente.
Cabe recordar que nuestra
función es ser “representantes” (ad honoren) de nuestro claustro, no somos ni
cadetes ni empleados de nuestrxs compañerxs. Como la mayoría de quienes
integramos parte de la comunidad educativa, cada unx de nosotrxs trabaja, y
además estudia, y elige donar su tiempo libre, para llevar adelante
las cosas que hemos realizado como:
-
Tutorías para los compañerxs que necesitan apoyo académico, sin pedir jamás
nada a cambio.
-
Talleres de pensamiento y reflexión sobre la práctica docente.
-
La revista para el departamento.
-
Participación activa en proyectos y organización durante el Congreso de
Perspectivas Pedagógicas en el Joaquín.
-
Promoción y difusión de las novedades del Departamento.
-
Reestructuración del cuadro de las correlatividades de las carreras de
Ciencias de la Educación
y Psicología.
-
Acompañamiento continúo a los ingresantes de las tres carreras.
-
Elevamos el pedido a la
Junta de horas institucionales para la creación del espacio
Seminario Permanente para las carreras de Psicología y Cs. de la Educación ya que en la
actualidad son exclusivas de la carrera de Filosofía.
Es verdad que no fuimos los
promotores de la apertura del turno tarde, sin embargo nunca nos opusimos sino
que además hicimos explícito nuestro apoyo (cada uno de nosotrxs firmo el
petitorio) e incluso desde la Junta Departamental contribuimos con argumentos
para su fundamentación. Y aunque para algunxs, nuestros criterios puedan parecer
desacertados –a menos que existan Mesías y Verdades Reveladas- nosotrxs estamos
convencidxs de haber actuado siempre desde la honestidad política y académica
más auténtica.
Otro de los reclamos que
hemos recibido fue no habernos pronunciado explícitamente a favor o en contra
de la homologación, pero lo cierto es que nuestra
posición fue esperar y respetar lo que se decidiera en la Reunión de Departamento
del día 7 de septiembre, para acompañar posteriormente lo que fuese el mandato
de la mayoría.
Si la política consiste en el
maltrato, en el hostigamiento, en el abuso de poder y en prácticas
destituyentes, nosotrxs, Crisol (esta agrupación de “cotillón” como alguien
dijo por ahí), simplemente optamos por
hacer algo diferente.